Qué fantástica es esa tecnología que hace que todo sea más cómodo, ¿no? El reconocimiento facial es un buen ejemplo, y en Estados Unidos ya han comenzado a usarlo en aeropuertos que usan este sistema para evitar tener que ir mostrando la tarjeta de embarque o el documento de identidad. No más malabarismos con las maletas: con tu cara basta para pasar los controles. Fantástico, insistimos.